“El problema con la realidad es que no entiende de teorías”.
Pareciera que siempre que el reloj encierra al sol para hacerlo día, nosotros vemos nuestras agujitas sosteniendo una luna repleta de noche.
En la oscuridad que envuelve a todos, nosotros con ramitas y bolsitas de plástico hacemos nacer al día, y en ronda encerramos al sol, por un ratito.
Nos pasa con las horas, nos pasa con el sentir, el decir, el vivir, casi con todo.
Por eso en días de alianzas, de estrategias, de consensos, de unidades tendientes solo a uno o una, nosotros asomamos el rostro y hacemos llegar unas palabras;
Desde hace tiempo una parte minúscula y pequeña impacta en los escenarios mas incómodos y decide no caminar, sino ser camino, no levantar individuos y personalizar procesos o luchas, sino ser camino llano, sin un rostro, con un nombre, que a la ves no tiene apellido, ni grupo sanguíneo, ni árbol genealógico, ni libro teórico o conceptual.
En ese camino, que no caminamos, muchos pasan y miran y dicen ¿este camino a donde lleva?.
Y siempre respondimos a ningún lado.
¿Y entonces por que dices que es un camino?.
Por que es un camino, pero sin caminantes, aquí el caminante es el camino.
De esa forma, tan peculiar, singular, plural y distinta se anda.
¿Y sino que?
¿Expresarle a nuestros hermanas y hermanas que nuestros reclamos y demandas dependen de quien sea gobierno de turno?
¿Embaucarnos en conseguir que en el poder este quien mas se acerque a nuestro sentir y pensar?.
Declararnos impotentes e incapaces de que sea el poder de turno, sea cual sea su color o idea el que deba ajustarse a nuestras proclamas.
Visits: 0