La “Farsa de La Haiga”: antecedente claro de Venditio Fumi ambiental y financiado por el Estado

Recuerdo que hace unos años, mientras viajaba en bicicleta por primera vez hacia Basavilbaso a ver a Fabián Tomasi, en La Haya se le hacía un “Juicio a Monsanto”. Cualquiera oye La Haya y juicio pensará que se trata de una presentación formal contra la multinacional del veneno en la Corte Internacional de Justicia. No fue así, se reunieron en un Salón en La Haya y allí se mandaron una parodia de juicio, que costó una fortuna y no obtuvo más resultado que aumentar el millaje de la banda de mistificadores que se mandaron a hacer semejante cosa. Una vergüenza que ha valido que muchos llamen a esa ridiculez y despilfarro de recursos en hotelería como “La Farsa de la Haiga”.

Los kioskos de Venta de Humo, son buenos pagadores, con un público cautivo y mistificador, que se suma a la farsa sin mucha revisión de la data que le tiran, estos señores venden paquetes de estudios y relevamientos en los que, como nos decía Fabián Tomasi, nunca encuentran Glifosato en las aguas del pueblo y en La Haya la encuentran toda junta. Ese paquete de servicios es lo que venden estos señores, pero no es más que humo puro, con fines de estricto lucro.

Capitanich pasará a la Historia con su título de “Cacique Humo Frondoso”. Ya tiene larga data en este rubro y quizás por eso sea tan respetado dentro del kirchnerismo, expresión de la oligarquía que se vende a diario como movimiento popular. Inauguró canillas y se emocionó hasta las lágrimas y ante las cámaras, rompió un diario, pero solamente las hojas, todo un profesional en la materia que va siempre por más, quiso poner una base militar yankee en el Chaco y lo pintan los K como un patriota.

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