Calma post Olivos Gate en la interna de Juntos en la Provincia de Buenos Aires
Por el momento, las encuestas indicarían que el Olivos Gate posicionaría a Juntos por el Cambio en lo que se da en llamar un “empate técnico” de la sumatoria de intención de voto de sus candidatos ante la lista única del Frente de Todos en la Provincia de Buenos Aires. Las encuestas serán motivo de este mismo bloque del Programa, pero influyen de manera decisiva en cierta paz entre los candidatos de la principal coalición opositora para estas PASO.
Los medios oficialistas se preocupan en marcar las diferencias dentro de Juntos por el Cambio, con escaso éxito, a pesar de haber ensayado en estos días diversos controles de daños sobre el despropósito de las reuniones y fiestas clandestinas en Olivos durante la cuarentena dura.
Así las cosas, Diego Santilli, el primer candidato del Pro a diputado nacional por la Provincia de Buenos Aires, y Facundo Manes, el primer candidato del radicalismo, dejan de lado planteos antagónicos y se preocupan por mostrar sus propuestas proselitistas prescindiendo del Olivos Gate, o al menos dejando que la desesperación del oficialismo haga su trabajo en ese sentido.
Diego Santilli propone como ejes de campaña, una fuerte y tradicional política de derecha en materia de seguridad. En ese sentido, el candidato del Pro promete una mayor presencia policial en las calles y terminar con las excarcelaciones. Algo que no es nuevo y en lo que coinciden con sus supuestos rivales del Frente de Todos. Vigilar y castigar sin concesiones, sin explicar mucho y con bastante demagogia, por cierto, apuntando como siempre a lo peor de un electorado que culpa de sus miserias a los emergentes sociales y no al crimen organizado o al sistema capitalista imperante y criminal.
Manes, salió con sus viejas y ya conocidas palabras grandes acompañadas de la nada misma. Esta vez el cliché será una Revolución del Conocimiento. El candidato radical dice a través de su prensa que: “Nuestra gran apuesta como Nación debe ser el conocimiento. Tenemos que poner la educación y la tecnología como motores de un proyecto que genere oportunidades y transforme la Argentina para que podamos soñar y tener un horizonte de prosperidad”. Su propuesta sostiene la articulación entre la educación y el trabajo, como garantía para que el país sea competitivo y el ingreso de las familias mejore. Muy bonito, por cierto, pero lo suficientemente vacío de sustento como para creerle el planteo.
Por el momento, Juntos por el Cambio pretende surfear la ola sin decir ni hacer gran cosa, al menos mientras los efectos del Olivos Gate sigan haciéndose sentir.
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