Mendoza en pugna por el candidato multifunción

Cada tanto la Provincia de Mendoza nos deleita con sus culebrones electorales y el surgimiento de figuras de la derecha y también de algunos oportunistas de la izquierda que se mudan a Buenos Aires por un cargo. Así con revolucionarios de cotillón y una derecha insoportablemente rancia, hoy los políticos de esa Provincia dan que hablar de nuevo. 

Yendo al tema, el Gobernador de la Provincia, de Juntos por el Cambio, Rodolfo Suárez, había decidido aceptar la candidatura a Senador Nacional por la lista Cambia Mendoza. Sí, es raro que un Gobernador en funciones sea a la vez candidato a un cargo legislativo, cosa que ya hizo en Buenos Aires, el Gobernador Daniel Scioli, yendo también como candidato a diputado nacional. Estos tipos de despropósitos no son nuevos y menos en ambas derechas hegemónicas y verticalistas de la Argentina. De ahí el silencio de la gente del Frente de Todos sobre el particular, que no se quejó del pase de Del Caño a la Provincia de Buenos Aires ni se va a quejar de esta burrada evidente de Juntos por el Cambio. 

La Constitución de Mendoza, en su artículo 115,  prohíbe que el gobernador sea candidato a senador nacional. Por eso el frente Vamos Mendocinos, que lidera el Partido Demócrata (conocidos popularmente como los “Gansos”) impugnó la candidatura en la justicia. Un juez provincial (sabemos que los jueces permiten lo que sea a quienes le pagan el sueldo), Walter Bento, avaló la candidatura y el 18 de agosto la Cámara Nacional Electoral, en un fallo dividido hizo lo propio. Se basaron ambos en el derecho que, según la lectura de esta gente le asiste a cualquiera de ser elegido, aún a los delincuentes. Parece que eso dice la Constitución Nacional, la misma que solamente se usa contra el Pueblo. El juez Bento usó la misma línea argumental, por lo que en cuestión de candidaturas nacionales la Constitución Provincial solamente existe para que los políticos se la pasen por las partes.

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