En el día de ayer el Gobierno convocaba a la dirección de ATECH al diálogo en Comodoro Rivadavia. Todo hacía prever que Arcioni buscaría cerrar el conflicto como para tener las elecciones en paz. No fue así, avalado hace poco en sus políticas por Alberto Fernández, el Gobernador del Chubut, sigue haciendo malabares con fuego y dilaciones. Su desfachatez criminal le ha valido el mote de Pinocho que le han puesto los trabajadores de la provincia, aunque para nosotros es algo así como un payaso sádico, como el Pogo de John Wayne Gacy. La esperada reunión sólo generó una nueva represión sobre los trabajadores que esperaban al Secretario Regional de ATECH, Santiago Goodman, con el Ministro Cassutti. La ley del gran garrote se aplica en Chubut, donde todo es posible, hasta bajar la propia lista de diputados para apoyar a Alberto Fernández, pero es imposible cumplir con lo pactado y mucho menos en tiempo y forma.

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