Somos de aquellos que creemos que cuando el Estado habla de Patria está buscando la excsusa sacrosanta para matar a alguien. El Estado no puede esconder su germen fascista y sale siempre a armarse hasta los dientes en el nombre de “LA PAZ”. El peronismo representa esta falacia a extremos en varias partes de su Historia de servicio a las oligarquías. No es de ahora que quienes desean un Estado bonapartista de falaz democracia recurren a acusar a otros de no querer la paz como defensa de sus bandas criminales y su accionar.

Aquí una de las joyitas de Perón defendiendo a la Triple A y negando su existencia y acusando a periodistas de ser de extrema izquierda, poniendose en el centro como defensor de la Paz y victima y ya conocemos como terminó la historia de Ana Guzetti, la periodista que le preguntó a Perón sobre los crímenes de la Triple A.

678: los pidebalas de CFK

Hace unos años atrás, en 2012, existía un programa con periodistas alcahuetes de Estado y al servicio de justificar al Gobierno que se llamaba 6-7-8, con un panel de desfachatados lenguasueltas que denostaban a todo aquel que no pensara igual que la empresaria hotelera que por esos años gobernaba. Desde allí se intentó la Operación Descarte que era despegar al Gobierno del asesinato del militante de izquierda Mariano Ferreyra. Como decíamos en esa época se debe actuar inmediatamente en caso de ataques a militantes populares ya que sabemos que en menos de una semana el principal responsable puede escapar para siempre del alcance de la Ley.

Orlando Barone, un pésimo periodista que sólo podía conseguir un programa en horario central por sus dotes de alcahuete, muestra aquí como en el arte de amenazar al que piensa distinto y amordazarlo no tiene límites ni chequea por que corre con el caballo del comisario, o del general en este caso. El periodismo que volverá pronto requiere que no olvidemos.

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