Una intoxicación por cocaína adulterada que acabó con la vida de 23 personas hasta el momento ha puesto al descubierto que cuando el poder quiere la celeridad para encontrar a narcos se hace ley. La razón de Estado para actuar y producir detenciones y allanamientos de narcos deriva de la muerte de personas y la trascendencia que las mismas tuvieron en la población, aunque al mismo tiempo no hubo análisis que lleven a sospechar de contactos políticos de la oposición con el narco. Por el contrario, el Gobierno se encuentra en ese sentido flojo de papeles para explicar por que está crisis sanitaria derivada de una mala producción de cocaína. Como en cada crisis, el Frente de Todos sacó a relucir su Cabaret, esta vez con papeles estelares de los ministros de seguridad nacional y el de la Provincia de Buenos Aires, tratando de que la sangre no llegue al río y que no se profundice mucho en la pertenencia política de los implicados en esta tragedia.
Visits: 0