Sabemos que el Estado argentino es fue y será aliado de quienes aniquilan a su Pueblo. Los sojadólares son una de las comidas predilectas de quienes conforman tanto el Frente de Todos como Juntos por el Cambio. La obsesión por los dólares fáciles nunca fue ocultada por los cretinos que nos gobiernan y son realmente fáciles para ellos a costa del cáncer y todas las enfermedades que producen sus comodities. No faltan quienes asesoran al Gobierno en la cuestión de esta aniquilación de ciudadanos que les reporta beneficios incalculables a sus cómplices y vasallos.

Siempre ha sido así, pero en 2023 parece que van a llegar a extremos. En la mañana de ayer, el ejecutivo de la envenenadora Syngenta, Antonio Aracre, se reunió con el Presidente de la Nación, Dr. Alberto Ángel Fernández, para delinear su incorporación al elenco criminal del Gobierno. En su hipocresía, el empresario afirmó que su misión será “acercar el mundo privado, de las inversiones, al sector público para capitalizar y potenciar las oportunidades que hay en los próximos tres a cinco años”. Dicho en buen romance se encargará de lo que hizo siempre, usar los recursos represivos del Estado para sostener el enriquecimiento criminal de los asesinos sojeros.

La incorporación del nuevo Gobierno no ocultó su finalidad de llevar una agenda extractivista con los socios de Juntos por el Cambio, entre otros. El nuevo jefe de asesores del Gobierno buscará “acercarse a la oposición o los sindicatos desde los temas que nos separan no sería una buena idea, hay que hacerlo desde los temas en que se puede encontrar algún consenso”, obviamente los soja dólares serán su tema de acercamiento predilecto, ya que el dinero siempre une a las fuerzas que dicen ser antagónicas, solamente hasta que aparece un billete verde que disputarse.

Aracre será, a partir del 1° de febrero, el jefe de asesores del Presidente de la Nación, en reemplazo de en reemplazo de Julián Leunda, quien renunció en diciembre pasado, tras ser mencionado en un supuesto chat de jueces, funcionarios porteños y empresarios que hicieron un viaje conjunto a la estancia del magnate Joe Lewis en Lago Escondido. Nada cambia, quienes asesoran al primer mandatario tendrán desde siempre como condición sine qua non la de atentar contra la vida de los ciudadanos de a pie y garantizar los beneficios de la acumulación capitalista para quienes más tienen.

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