Algunos me critican por publicar estadísticas sobre la pandemia.
Dicen que “deshumaniza” el problema.
Son los mismos que, con razón, esgrimen las cifras sobre pobreza, indigencia, desocupación o inflación, por decir algunas.
Hay una doble vara que roza con la hipocresía entonces.
La realidad es que no les gusta ver números que van en contra de lo que ellxs creen y sostienen.
Las estadísticas dicen que el 99 y pico % no está enfermo de covid.
Y que, por lo tanto, nos encierran a todos en lugar de a los contagiados, como correspondería.
Algo totalmente RIDÍCULO.
Nos encierran blandiendo el argumento del colapso sanitario al que ellos mismos nos llevaron:
11.660 camas uti para 45 MILLONES d personas es la clara muestra de ello.
Que el presupuesto nacional destine el 4.5% a la salud pública en medio de una pandemia mientras asigna el 8% al pago de la Deuda que no debemos también.
Y encima nos encierran sin darnos un mango, para que nos caguemos de hambre, de angustia, de depresión o de un infarto por el disgusto, no de covid.
Mientras tanto, la inflación es imparable, los precios de los alimentos no dejan de subir, y los impuestos y las tarifas hay que seguir pagandolos según el gobierno.
Para eso sirven las estadísticas, para ver y/o mostrar como nos toman el pelo y nosotros nos dejamos.
Esta pandemia nunca tuvo enfermos activos ni al 1% de la población y provocó este desastre.
Imagínense lo que haría una que afecte activamente al 2, 3, 4 ó ni qué hablar al 5% de la población.
La responsabilidad de este desquicio es de todos los gobiernos que desde hace DÉCADAS se pasan por la entrepierna a la salud pública, no del pueblo… o sí, por haberlos elegido y soportado.
A ellos y al sistema que nos hambrea y nos mata.
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