Edgardo Kueider y su Secretaria Iara Guinsel Costa parecen estar cómodes en su prisión domiciliaria en el Paraguay ya que rechazaron ser extraditados a la Argentina. Una serie de comodidades serían las causantes de esta decisión, como mínimo.

Nada que provenga de este señor puede estar cerca siquiera de ser decente y este Komodín de la Korrupción hará lo que sea para pasar lo más cómodo posible su tiempo en prisión.

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