Los soberanos descartes de Kueider

Edgardo Kueider no aprovechó para nada que la Oficina Anticorrupción no mete en prisión a nadie si no es muy estúpido y desde 2022, cegado de impunidad no presentó una declaración jurada de nada. El ex. Senador en su última declaración de 2021 dijo que tenía solamente 8.500 dólares y algunas propiedades más. Esto lo llevó al ojo de los juzgados provinciales y federales y no le importó mucho, supuso que la protección que le daba ser comodín de la Korrupción le alcanzaba y sobraba, pero se lo tomó muy a pecho y se descuidó y es de saber que nuestres polítiques solamente se alinean para condenar a quién tiene muy pocas luces para esconder lo que hace.

Ya preso, el Senador ensayó los descartes propios de los corruptos que son descubiertos, le echó la culpa a quien estaba al lado de él.

Edgardo Kueider dijo que la valija con 200 mil dólares no era de él si no de su Secretaria Iara Guinsel Costa, quien estaba en el auto en el que el legislador regresaba de Foz de Iguazú a Ciudad del Este. Es más, su abogado asegura que el dinero era de una empresa de la cual ella es apoderada.

Pero Kueider no es un corrupto cualquiera, supera todo lo conocido, lo cazan con 200.000 verdes y se muestra como un gran repúblico al mismo instante. Un genio de simulación y un traidor como pocos. Muestra de ello es que a cinco días de ser pescado in fraganti, el ex-Senador, a través de su oficina de prensa, formalizó el pedido licencia en su cargo para “no entorpecer la investigación”. El comunicado de la mencionada rezaba que: “En función de los hechos de público conocimiento, (Kueider) sostuvo que su determinación tiene como objetivo que no haya ningún tipo de impedimento a la hora de que se lo investigue”. El 9 de diciembre ratificaron desde su despacho el pedido de licencia del Senador. La jugada no tuvo gran resultado, pero es muestra de cómo está dispuesto a defenderse Kueider.

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