Finalmente, la República del Paraguay debió tener problemas luego de cubrir la demanda de altas temperaturas con el retiro de energía de Yaciretá sin poder venderle a los brasileños al parecer mucho más de lo que Argentina le compra a precio de ganga y le paga a los premios.

El 4 de octubre, la Hermana República del Paraguay, decidió retirar solamente el 10% de la energía de Yaciretá y venderle a la Argentina en las condiciones casi de aceptación hasta de un derecho de pernada a como dé lugar.

No creo que haya sido un acto de candidez y buena voluntad por parte del Gobierno del Paraguay, ni nada que se le parezca. Más parece una decisión acertada, en vistas de una realidad que los dejó en desventaja: Argentina no entrega más dólares a nadie que no sean los organismos multilaterales de crédito. Ya ha mostrado que no le teme a la piratería, si es necesario para su básico libreto de diplomacia que parece redactado por el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte o el Tercer Reich, que da lo mismo.

La violencia y el virtual embargo de energía al Paraguay, perpetrado por auténticos retenes antiguaraníes, sostenidos por tropa federal en todas las fronteras, al fin le ha dado un resultado al tan siniestro como torpe Gobierno de la Argentina.

Obviamente, no es algo que al equipo de El Irreverente lo enorgullezca, muy por el contrario, a lo sumo el Estado nos nausea, una vez más.

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