Otros hitos de la bravuconería del discurso presidencial
El Presidente Milei cuando no tiene ni idea de qué hacer se cuelga de mandar fruta, como haciéndose el guapo cuando lo que hace es rogar. La agresión verbal es su “Amén” y sabe lo inaplicable de su vendetta al Congreso de la Nación, pero lo acompaña con escenografía política de ira.
En ese orden de bochornosas conductas el Presidente de la NAción marcó nuevos hitos, a saber:
- “Al Congreso le digo: si ustedes quieren volver atrás, me van a tener que sacar con los pies para adelante”: otra vez Milei mostrando su tremenda debilidad ante el Congreso de la Nación vuelve a decir que se inmolará por defender su Gobierno y le da ideas a gente que no está bueno que un Presidente ande soltando así como si nada.
- “Si aumentar el gasto público fuera una solución seríamos el país más próspero, no sólo del Mundo, si no de la Galaxia entera”: esta vez el Presidente llegó a un nivel de delirio supremo, diríamos un Master Internacional en el área. En su ánimo de exagerar, tomando al pueblo por idiota no se fija en gastos y muestra que hay pocos tan buenos en eso de decir cualquier verdura para justificar lo que no puede de ninguna manera.
- “Tenemos que elegir entre la responsabilidad y el realismo mágico”: curioso que nuestro Presidente que suele recurrir a él para graficar aquellas situaciones en las que no tiene una cita donde agarrarse y que no caiga en desgracia. Milei se siente en los zapatos de Jesús y nos habla en parábolas por que no supone idiotas. Su mesianismo lo pone en inventarse un lugar de responsabilidad que le queda bastante grande y pone al resto del país que no avala sus idioteces en un lugar de fantasía. Esto dicho por un tipo que parece que vive en Narnia y no en la Argentina.
Cerró su performance con sus cánticos que en su imaginario piensa que son de guerra, no respondió más que hacen lo que quiero o los voy a hacer talco, puede sonar siniestro, si acaso pudiera aplicarlo.
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