Murió Jorge Lanata y con él gran parte de un periodismo disruptivo

Muchos al parecer suponen que las redes sociales son inútiles y que ya un nuevo establishment, que no es más que la cría sana de les KomuniKagadores Menemistas, es la única verdad. Sus fétidas almas enfermas siempre se han lanzado sobre quienes tocaban a sus deidades, príncipes y sobre todo emperatrices. Y eso es lo que hacía Jorge Lanata, enojar alKahuetes, activar redes de odio parapolicial, que parecían su mayor fuente de publicidad.
Desde esos lugares se emiten los peores efluvios humanos y el Poder lo sabe, lo acepta y lo aprovecha. Hay gente que hace cualquier cosa por dinero y lo que toque a los mecenas de su flojera, eso reflejaba Jorge Lanata, por eso lo odian aún.
De este tipo devaluado de humanos surgen las críticas más fanáticas, odiado por igual por los poderosos en los últimos 30 años. Podemos decir que el peronismo tuvo especial furia con él y desde su más tierno menemismo criminal al siniestro kichnerismo, el odio y hasta la acciones de odio destilado contra él numca han cesado.
Los fanátiKos lo odiaban y lo odian aún era malo para los negocios eso de no hacer lo que ellos hacen: desinformar al Pueblo.
Murió Jorge Lanata, volviendo a vencer a los parapoliciales, que son los únicos que los verás celebrando el fin de su disruptiva vida, la antitesis de su servil e innecesaria existencia.

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