La Cámara de Casación Penal de Paraná dictó el 19 de noviembre la prisión preventiva contra el ex gobernador justicialista Sergio Daniel Urribarri. La medida se extenderá hasta tanto la sentencia que lo condenó por cinco causas de corrupción quede firme, se alegó para el particular desde Fiscalía el “riesgo de fuga”, muy creíble en alguien que se escondió anteriormente en el extranjero para evitar prisiones y notificarse de malas noticias.

El trámite pasará ahora a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, al habérsele concedido el recurso extraordinario federal presentado por la defensa del reo.

El triunvirato de conjueces, formado por las Dras. Marcela Davite, Marcela Badano y Evangelina Bruzzo planteó en los fundamentos de su decisión que:

• “Encontrándose acreditada la probabilidad de que en libertad los condenados puedan frustrar los fines del proceso, entiendo que se encuentran motivos suficientes para anular la resolución impugnada y disponer la prisión preventiva en unidad carcelaria, teniendo en cuenta especialmente que en función de los tratados internacionales que el Estado suscribió, este proceso penal debe ser sobreprotegido, en tanto el deber de investigar, juzgar y castigar tiene una mayor intensidad cuando lo que está en cuestión son delitos de corrupción como los que aquí se juzgaron”.
• “Los condenados a través de sus abogados han dilatado el proceso con diversas maniobras que trasuntan o un desconocimiento de la vía recursiva, o una voluntad ex professo de no respetarla, indicadoras en sí del riesgo de frustración de los fines del proceso penal”

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