Una larga historia de traiciones de vecinos hostiles
A las ya tradicionales traiciones chilenas y uruguayas que ya son endémicas, en esas naciones históricamente siervas del imperialismo yankee y británico, quien por el momento se lleva todos los premios en apoyo masivo, entusiasta y activo a la ocupación británica en nuestras Islas Malvinas. Los otros dos Estados limítrofes: el Estado Plurinacional de Bolivia y la República del Paraguay no nos traicionan, no sabemos bien si por principios o por que no tienen nada que venderle de interés para la ocupación de Malvinas al Reino Unido.
El Brasil de Lula le echa ganas a las relaciones orales y profundas con el Reino Unido y su sumisión lo lleva a prenderse en cuanto acto de guerra puede contra la Argentina, esta semana uno más, que tampoco será el último siquiera pensamos de este mes, tal la pasión de los traidores de Planalto.
El 8 de noviembre por la tarde y saliendo a la medianoche del día siguiente, que es la hora de los ladrones y los traidores como el Presidente de la República Federativa del Brasil, Luis Inácio Lula Da Silva, aterrizaron en el Aeropuerto Internacional del Galeao de (otra vez, Río de Janeiro) cinco cazas Eurofighter Typhoon, un Airbus A400M (ZM4127) y un Voyager Airbus 330 KC2 (ZZ334) de la Real Fuerza Aérea del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Nuevamente, en un acto vergonzante de sumisión al Imperio que usurpa nuestras Islas Malvinas, Brasil participa en actos de guerra brindándole hospitalidad y abastecimiento y asistencia a tropa y armamento cuyo fin es aniquilar todo intento de recuperación del Archipiélago por parte de la Argentina.
Gracias a ese apoyo inconmensurable a los aviones de combate británicos (fueron estafados peor que la Argentina con los F-16 daneses), pudieron llegar con sus cafeteras a Malvinas y dar su mensaje el 12 de noviembre que les traducimos ahora: “Desde la protección de la increíble fauna y flora de la región hasta la defensa del derecho de autodeterminación de la isla. Me siento honrado de haber podido unirme a los isleños y al personal de servicio en la conmemoración de quienes tanto se sacrificaron para proteger las Malvinas”. Luke Pollard, Ministro de la Fuerzas Armadas Británicas siguió con su prédica, proclama y provocación asegurando: “El compromiso del Reino Unido con la seguridad y la prosperidad económica de las Malvinas es tan firme como siempre”. Otra nueva mojada de oreja del Reino Unido con la inestimable colaboración de los caínes del Brasil.
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