El Superministro salió con descaro a vender lo que quede de la abuelita, así sean las cenizas creando una nueva doctrina para el Estado Patrio: la Doctrina Massa. En su exposición la “Cumbre del G20 de Ministros de Finanzas y Gobernadores de Bancos Centrales”, en la ciudad india de Bengaluru (India), lanzó una frase que todos los medios adictos al Gobierno salieron a repetir como la verdad revelada. Dijo: “El patrimonio natural y la biodiversidad de nuestros países sirve a la humanidad, lo que nos convierte en acreedores no reconocidos frente a los acreedores financieros”. El Venditio Fumi evidente de esa frase nos indica que si nos van a dejar hecho talco el país, es que le dejen caer en sus bolsillos un billeticos verdes. El país ya ni tiene puesta la bandera de remate, sino el banner de mesa de saldos por liquidación total. El discurso fue en si una sucesión de entregas por rebajas en las tazas, Patético, miserable y descarado lo del Superministro.

Ante una realidad reventada, ya no necesitan guardar las apariencias, ni simular que son unos completos marmotas: la misión es conseguir dólares, que en la matemática peronista son elecciones o reaseguros en caso de derrota.

Seguimos sin que nadie vaya preso por la estafa de los bonos y de como se chorearon millones descaradamente con información privilegiada. ¿Y que esperaban, que luchen contra Braden? En serio, esta gente y todos los que se vendieron en los últimos años, están cortados por la tijera de la posverdad, como le llaman hoy, los Massa, los Página y todos su Malditos ParaKos a la mentira y el encubrimiento descarados.

¿Dar pena en el G20? Y sí, siempre es mejor que gobernar para esta gente ver de dónde se consiguen dólares. Esa obsesión que el kirchnerismo proyecta sobre los otros, con la característica hipocresía de este vasalle imperial-oligarKico. La vergüenza no es opción en este momento y un desfachatado como Sergio Massa vive su primavera de venta de humo.

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